Meditación guiada: 8 RESPIRACIONES HACIA LA ALEGRÍA

Publicado en: Emociones

A través de la respiración, esta meditación fortalece la compasión y nos ayuda a centrar nuestra atención para trabajar mejor con los bloqueos y los momentos difíciles del día.

El cultivo de la alegría es una parte fundamental de la práctica de Mindfulness porque nos ayuda a estar más plenamente presentes en la vida, y nos da la motivación que necesitamos para abrazar y transformar nuestro sufrimiento. Esta es una práctica para cultivar la alegría y que puedes utilizar en cualquier lugar y en cualquier momento.

Puedes hacerla en solo ocho respiraciones o detenerte en cada ejercicio durante unos minutos antes de seguir, para que la práctica sea más profunda, y llegues a conectar de forma consciente  con cada idea. Cada respiración se une a una palabra para ayudarte a recordar como centrar tu atención y todas ellas cultivan en ti la alegría.

  1. En el primer paso y con la primera respiración lleva tu conciencia a la sensación de tu respiración. Mantén la atención en las sensaciones físicas del movimiento de la respiración al salir y al entrar. Acompaña a la inhalación y a la exhalación en todo su recorrido, desde el inicio hasta el final y vuelta a empezar. La palabra en esta etapa es RESPIRAR y recuerda detenerte el tiempo que necesites.
  2. En este momento lleva tu atención a todas las sensaciones tu cuerpo. Deja que tu conciencia ocupe completamente tu cuerpo, y date cuenta de lo que descubres. Puede que algunas sensaciones sean agradables, otras desagradables y otras neutras. Mira a ver si puedes permitirte sentir esas sensaciones sin pretender que cambien en nada. Pon especial atención a cualquier tensión, pesadez, o agitación. La palabra para cada respiración en esta etapa es CUERPO.
  3. En este momento suelta, intencionadamente, toda la tensión, la pesadez y la agitación de tu cuerpo. Imagina que te estás lavando con la exhalación, soltando completamente, dejando que tu cuerpo se ablande. Suelta también todo contenido mental, déjalo ir. La palabra será ahora SOLTAR.
  4. Ahora, dirígetelas siguientes palabras sintiendo todo su significado. “Que puedas vivir con facilidad y ligereza de mente y cuerpo”. Observa si puedes dirigirte estas palabras desde tu corazón, con generosidad y amor hacia ti. Te deseas bienestar y envías compasión a tu corazón y a tu mente. La palabra para cada respiración es AMOR.
  5. En esta quinta etapa, observa si emerge algún deseo o aversión en este momento. ¿Hay alguna parte de ti deseando que la realidad fuera diferente a como es ahora? ¿Luchas contra las cosas tal y cómo son ahora mismo? Simplemente observa tus apegos y aversiones y permítete sentirlos sin pretender que desaparezcan. No son tu enemigo sino una parte de ti que necesita tu cuidado y amor. La palabra para estas respiraciones es DESEO.
  6. En este momento vamos a dirigir nuestra respiración a darnos cuenta de que todo lo que necesitas para ser feliz ya está presente en este momento. Todas las condiciones necesarias para la paz, alegría y libertad ya están aquí. En cada momento de la vida hay infinitas razones para sufrir e infinitas razones para ser feliz. Lo que importa es dónde estamos poniendo nuestra atención. Dejemos de ignorar las cosas positivas que tenemos al alcance en este momento. Los problemas existen, pero no son lo único que existe. Para esta respiración concéntrate en todo lo bueno que tiene la vida. Ya no nos arrepentimos por el pasado ni nos preocupamos por el futuro. Estamos aquí, presentes a los milagros de la vida. La palabra en esta etapa es ALIVIO,
  7. En este séptimo paso, date cuenta de que estás vivo. Según respiras, siente la energía de la vida moviéndose en ti. Con esta respiración reconocemos el milagro de estar vivos. Despertamos completamente a la experiencia de estar vivo en el momento presente, y experimentamos su belleza. Si solo tuvieras unos minutos de vida, sería obvio que 24 horas de vida son increíblemente preciosas. No ignoremos esta verdad. La palabra en cada respiración es VIVO.
  8. Finalmente, pon tu atención en todo lo bello en ti y a tu alrededor. Tan pronto como nos deshacemos de nuestros deseos y despertamos en el presente vemos que la propia realidad es indescriptiblemente bella. Cada uno de nuestros sentidos la vista, el oído, olfato, gusto, tacto y nuestra capacidad mental nos brindan esta belleza cual valioso regalo. Todo lo que tenemos que hacer es disfrutar. La palabra para esta respiración es BELLEZA.

Podemos practicar estas ocho etapas, deteniéndonos en cada palabra el tiempo que necesitemos; o como práctica más rápida, cuando la tengamos integrada, con una respiración con cada palabra, de la siguiente manera:

  • RESPIRAR, aspirar y espirar
  • CUERPO, aspirar y espirar
  • SOLTAR, aspirar y espirar
  • AMOR, aspirar y espirar
  • DESEOS (APEGOS), aspirar y espirar
  • ALIVIO, aspirar y espirar
  • VIVO, aspirar y espirar
  • BELLEZA, aspirar y espirar

No olvides que cada momento puede encerrar un motivo de alegría, solo necesitas detenerte lo suficiente para darte cuenta y hacerlo tuyo.

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8 Breaths to Joy: A Guided Practice